Mierda que las minas somos complicadas ehh! Yo ya no quería seguir con eso. Cada vez me aburría más, cada vez me gustaba menos. Pero nunca lo corte porque sabía que me iba a arrepentir, necesitaba la forma de terminalo por un tiempo y tener la posibilidad de volver después. Ocho mil ideas tirabamos, no sabía como decírselo para que no enojara, para que me entendiera, para después poder volver. La mejor forma era que él lo terminara. Pero bueno decidí que el tiempo decida. Lo que menos me iba a esperar era que esa misma noche él hiciera lo que yo quería, no se parecía como si me hubiese espiado, como si alguien le hubiese contado. Pero claro, era de suponer lo que a mi no me gustaba a él tampoco. Pero digo no, si conseguí lo que necesitaba, por qué me siento mal y no es ese mal de arrpentimiento, es mal de melancolía de de que me cuesta darme cuenta que terminó. Pero es por las vacaciones, lo sé. Todo cambia en esta etapa del año, todos cambian. Sino miralo a él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario